El asesinato de Inoska Alejandra Peña Marín, de 27 años, fue esclarecido por un gran equipo de la Policía Científica.
La víctima fue encontrada el pasado 12 de julio dentro de una maleta, en una zona boscosa de la Urbanización Terrazas de la Vega, en Caracas.
Peña fue reportada como desaparecida ante la División de Víctimas Especiales, puesto que sus familiares desconocían de su paradero desde el 9 de julio.
Al encontrar la aterradora escena, la división de homicidios del CICPC determinaron que la mujer fue asesinada por Jarry Hidalgo Palomares, de 31 años, con quien mantuvo una relación oculta durante cuatro meses.
Se obsesionó
Sin embargo, Peña decidió terminar la relación y le informó que tenía a otra persona. Esta confesión enfureció a Hidalgo y comenzó a contactarla por Facebook y WhatsApp para continuar la relación.
Su obsesión lo llevó a conocer la rutina de la víctima y el día 9-J, la esperó en las cercanías de su vivienda, donde se ofreció a llevarla a bordo de su moto; sin embargo, en el trayecto, la convenció de desviar la ruta y acudir a su casa.
Hidalgo intentó convencerla de retomar la relación, pero al notar su negativa la sometió y la abusó sexualmente. Luego la asfixió.
Una vez ejecutó el crimen, contactó a su amigo, Jesús Alexander Marcano Rivera (36), y le contó lo sucedido para que lo ayudara a meter el cadáver en una maleta y tirarla a la zona donde fue encontrada.
Ambos fueron detenidos y quedaron a la orden del MP.
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