Jueves 02 de octubre de 2025
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Héctor Lavoe, el rey de la puntualidad, estuviese cumpliendo 79 años: "Yo no soy quien llega tarde, es que ustedes llegan muy temprano"

La afirmación de que siga siendo, hasta la fecha, el mejor cantante de salsa brava, viene de legendarios músicos que tuvieron la oportunidad de trabajar junto a él en estudios de grabación y sobre una tarima, como por ejemplo Rubén Blades y Oscar D´ León, quienes aún siguen vigentes

Héctor Lavoe, el rey de la puntualidad, estuviese cumpliendo 79 años:
Héctor Lavoe estuviese de cumpleaños este martes 30 de septiembre. Foto: RRSS.
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Héctor Lavoe fue y sigue siendo el mejor cantante de salsa brava que el mundo haya conocido, un hombre cuya vida fue como la de otros grandes artistas de la talla de Felipe Pirela y Javier Solis, llena de triunfos y desaciertos, sobre todo en el ámbito personal y sentimental.

La afirmación de que siga siendo, hasta la fecha, el mejor cantante de salsa brava, viene de legendarios músicos que tuvieron la oportunidad de trabajar junto a él en estudios de grabación y sobre una tarima, como por ejemplo Rubén Blades y Oscar D´ León, quienes aún siguen vigentes

Nació un 30 de septiembre de 1946 y fue bautizado como Héctor Juan Pérez Martínez en Ponce, ciudad perteneciente a Puerto Rico, donde se crio junto a sus padres y hermanos en el seno de una familia muy humilde. Fue en su terruño donde "El Cantante" dio sus primeros pasos como artista.

Desde su infancia entendió que cantar también era contar lo que pasa en los barrios. Cada canción era un reflejo de su gente, de sus calles y de sus historias y eso lo llevó a forjar un lugar imprescindible en la historia de la salsa junto a Willie Colón y los Fania All-Stars.

“Yo soy el cantante, que hoy han venido a escuchar…”. Es una de las letras que mejor resume su carrera. En esa línea está todo, la fama, la vulnerabilidad, la alegría, la tristeza, los excesos. Detrás de la música estaba la vida, pero la vida no siempre fue amable con él.

Perdió a su madre de niño, a su hermano por sobredosis, a su hijo en un accidente, y tuvo muchos problemas con las drogas. Pero su voz nunca se apagó. Se transformó en el ídolo indiscutible de la salsa, capaz de improvisar y meter en sus pregones la vida misma, volviéndose eterno para generaciones que crecieron con sus canciones.

Se trasladó a la ciudad de Nueva York a mediados de la década del 60 en busca de fama y fortuna como cantante. Trabajó por algunos meses con la orquesta del percusionista Francisco "Kako" Bastar, logrando grabar como primera voz del coro en el año 1967. Su nombre artístico, Lavoe, venía del francés la voix, “la voz”, y esa voz terminó finalmente hablando por todos.

El disco saldría al mercado al año siguiente. Pero durante el mismo 67, se produce su unión con el trombonista y arreglista Willie Colón, que redundaría en su primer disco como cantante principal, "El malo". Héctor, con su estilo callejero y desafiante, resultaría el complemento perfecto para la música de Colón, estridente y atrevida para los puristas en la fusión de ritmos.

Del 1967 al 1973 el binomio produce discos como "La gran fuga", "Cosa nostra", "Lo mato", "El juicio" y los dos volúmenes de "Asalto navideño". Los mismos son de vital importancia para la solidificación de la salsa como género. Canciones como "Juana Peña", "Barrunto", "Calle Luna, Calle Sol", y "La murga", son sólo algunos de sus éxitos.

Luego de casi una década juntos, Willie, incapaz de seguir el ritmo de vida de Héctor, dado a la juerga y el exceso, decide que es mejor que siga cada cual por su lado. Esto coincide con, o tal vez propicia, la estrategia a seguir por el sello Fania, de lanzar a los cantantes de más éxito como solistas, apartados de las orquestas que le dieran fama.

La separación es amistosa y no definitiva, pues Colón fue el productor de varios de los álbumes más exitosos de la carrera solista de Lavoe, que comienza en el 1975 con el disco "La Voz". Le siguen los elepés "De ti depende" y "Comedia", que producen éxitos como "Periódico de ayer", de la autoría de Tite Curet Alonso, y la canción que por siempre le definiría: "El cantante", escrita por Rubén Blades. También fue uno de los intérpretes estelares de la Fania All Stars, dando la vuelta al mundo con ellos.

Tras la suspensión de un concierto en Bayamón que marcaría el reinicio de su carrera en la Isla, Héctor se lanza del décimo piso de un hotel de El Condado. No logra suicidarse, quedando malherido e incapacitado de volver a cantar.

Transcurre sus últimos años en Nueva York, donde promotores se lucran presentándolo en conciertos cuando apenas podía hablar. A pesar de las ventas generadas por sus discos, Lavoe se vio en condición económica precaria. Murió el 29 de junio de 1993.

Héctor Lavoe es considerado el mejor sonero(que no es lo mismo que mejor cantante), después de Ismael Rivera "El Sonero Mayor". Su carisma en tarima y su don de gente fuera de ella, le ganaron la idolatría de su fanaticada, que casi le venera como un mártir de la rumba y la calle.

"Héctor le podía mentar la madre a todo el mundo y el público se reía. Lo malcriaron", señaló Willie en una ocasión. Famoso por llegar tarde a sus compromisos, Héctor solía decir que "yo no llego tarde, el público llega muy temprano", en su canción "El Rey de la Puntualidad".

En el escrito citado al principio de esta breve biografía, Willie le describe como "graduado de la Universidad del Refraneo con altos honores, miembro del Gran Círculo de los Soneros, poeta de la calle, maleante honorario, héroe y mártir….por eso lo bautizaron como ‘El Cantante de los Cantantes".

Noticia al Día / Agencias

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